¿Cómo extrañar algo que nunca has tenido? ¿Cómo recordar lo que nunca pasó?
Con un mar de sentimientos, sobrepuestos a la lógica, las palabras no sirven para nada.
Las miradas, envueltas de pasión, navegan a la deriva.
Ahora que cada poema se perdió en la distancia, el fuego se apagó.
Solo queda sonreírle a la pared mientras tu recuerdo yace inerte en mi memoria.
Nuestros “destinos” nunca estuvieron unidos.
Quizá el azar nunca nos junte.
Ojalá el universo nos ayude.
Ojalá.